Foto BuchΓ³n Jienense Rosado
El BuchΓ³n jiennense es una raza espaΓ±ola de palomos la cual es originaria de la provincia de JaΓ©n, en AndalucΓa, alcanzΓ³ la categorΓa oficial de raza con la aprobaciΓ³n de su estΓ‘ndar allΓ‘ por el aΓ±o 1.984. La expansiΓ³n y cultivo llega a tal extremo que en la actualidad existen diversas sociedades dedicadas al BuchΓ³n Jiennense en muchas de las provincias espaΓ±olas como es el caso de Albacete, Ciudad Real, Madrid, Barcelona, Valencia, Zaragoza, Palma de Mallorca y Vigo por citar algunas, en TΓ‘nger y TetuΓ‘n ciudades pertenecientes al norte de Marruecos, no siendo raro aficionados incluso en SudamΓ©rica o Miami que adquieren ejemplares para su crΓa, selecciΓ³n y cultivo.
El BuchΓ³n Jienense es un palomo de tamaΓ±o mediano, de cuello recio, esbelto, en posiciΓ³n normal estirado, largo y echado un poco hacia atrΓ‘s, de pecho ancho y unas grandes y poderosas alas para el vuelo.Los orΓgenes del Palomo BuchΓ³n Jienense se remontan a la ubicaciΓ³n Γ‘rabe en AndalucΓa, probablemente estos fueron los que trajeron la raza inicial, a partir de ahΓ comenzΓ³ a ser seleccionada y cultivada hasta llegar a finales del siglo XIX que fue llevada esta raza por emigrantes de la provincia de JaΓ©n a todo el Levante donde la cruzaron con otras razas autΓ³ctonas que ya existΓan allΓ, cuyos productos seleccionados ya los llamados buchones valencianos, fueron de nuevo emigrados a la provincia de JaΓ©n, influyendo notablemente sobre todo en su aspecto exterior, pues se consiguiΓ³ un palomo mΓ‘s bello, esbelto y morfolΓ³gicamente mΓ‘s perfecto en cuanto a su estructura inicial.
Foto BuchΓ³n Jienense en Vuelo
Este palomo es perteneciente al tipo de los buchones, o sea a los que por la selecciΓ³n de muchos aΓ±os y partiendo del tronco comΓΊn de la raza zurita, se ha llegado a un desarrollo casi antinatural del buche, de ahΓ su nombre generalizado de buchΓ³n "Buche". Pero sus principales virtudes destacables entre todos los buchones son sus grandes dotes de seducciΓ³n, su tambiΓ©n constancia en el vuelo y trabajo para atraer a su palomar a los perdidos, aunque la mayorΓa de ellos dedican su trabajo a las citadas zuritas.
El Palomo BuchΓ³n Jienense es conocido tambiΓ©n con el apodo de "LadrΓ³n" o "Ratero", todo esto debido a su cualidad de conquistador.
En tΓ©rminos mΓ‘s sencillos se les mantienen siempre solteros y dedican toda su galanterΓa a buscar novia, cuando la encuentran, se les premia con un tiempo de nupcialidad y se le retira de nuevo la consorte y vuelta a empezar. Esa consorte si tiene propietario se le devuelve a travΓ©s de su sociedad y si no lo tiene por ser salvaje, se le da otras finalidades.
Los colombicultores lo reconocen como:
Palomo de tamaΓ±o mediano, de cuello recio, esbelto, en posiciΓ³n normal estirado, largo y echado un poco hacia atrΓ‘s, de pecho ancho, alas grandes y poderosas para el vuelo, no debiendo sobrepasar las plumas de la cola, quedando un par por encima de Γ©sta, en su posiciΓ³n de arrullo. No debe de arrastrar el buche por el suelo, no bajo de patas, mΓ‘s bien un poco esbelto, lo que le da un aspecto armonioso.
De ojos con el iris color rojo pigmentado, brillante en los azules, negros, toscados, mulatos y colores afines, siendo en los de pluma clara como bayos, cenizos, blancos y de color rosa, anaranjados. En ninguno de los casos de color amarillo o verdoso.
Su pico, en su primera edad da la sensaciΓ³n de ser mΓ‘s bien largo, pero a medida que va alcanzando madurez va engordando las rosetas, desaparece esa largura aparente de su primera edad. DeberΓ‘ ser fuerte y algo romo, no presentando forma de pico de loro. En la parte posterior suelen aparecer en algunos ejemplares dos o tres verrugas no considerΓ‘ndose defecto el no tenerlas.
El buche deberΓ‘ tener forma de pera, y no muy grande, algo descolgado, en posiciΓ³n normal, no debiendo de arrastrarlo arrullando, evitando con ello el balanceo en el vuelo. No debe de tener el buche alto o subido a los lados del cuello. Posee una irregular tirilla emplumada que parte el cuello en dos mitades sin llegar al buche. No se considera defecto el que no la tenga.
Sus plumas estΓ‘n Pegadas al cuerpo, de tonos brillantes y sanas, admitiΓ©ndose cualquier variedad de tonalidad de color, pero siendo preponderante los colores como los azules en primer lugar, toscados, negros gotados o franciscanos, avionados, porcelana o pelo de rata, cenizos, etc. La cola de tamaΓ±o mediano, normalmente de 12 plumas, son anchas y vigorosas.
Conjunto en vuelo: Con el cuello elevado por encima de la espalda, formΓ‘ndose un morrillo al encontrarse con una paloma ajena, temblΓ‘ndole ligeramente.
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